Introduccion:
El ser humano nunca fabricara algo que no exista en la misma
naturaleza, como dijo en quimico frances, Lavoisier en su teoria, acerca de la
ley de la conservacion “la materia no se crea ni se destruye, solo se
transforma”, debido eso, lo unico que hace el ser humano en sus inventos y
logros, es de alguna que otra manera inmitar lo que ya esxiste en la misma
naturaleza.
Lo primero que debemos entender es el Concepto tactil es si
misma
¿En que consiste
la sensacion tactil?
Imaginese que alguien le toca la mano, si el objeto con el
que le han tocado es puntiagudo o romo, si ha presionado mucho o poco, si está
caliente o frío…. Y no sólo eso, salvo que tenga algún problema neurológico
importante, usted sabe exactamente que el punto de contacto está en el dorso de
su mano y no en el pié, en el pecho, o en la cara, es decir, ha localizado
dónde se ha producido el contacto. La sensación del
tacto con un objeto externo, desata una serie de sensaciones que comienzan en
las terminaciones nerviosas del lugar de contacto y acaban el en cerebro, Allí, en el córtex cerebral, tenemos
una especie de mapa corporal que indica dónde nos han tocado, a partir de esas
ideas el ser humano ha sido capaz de aplicar la tecnología táctil a todos los aparatos modernos que incorporan
dicha tecnología. Una pantalla táctil, para que
su nombre se ajuste a lo que se espera de ella, debe ser como nuestra piel, es
decir debe reaccionar de alguna manera al contacto, debe transmitir la posición
del lugar exacto en el que ha tenido lugar y debe tener un “cerebro
electrónico” que interprete la señal y la asocie a la función que queremos
realizar.
Tecnologías
táctiles: capacitivas, resistivas,
acústicas, ópticas, de resonancia electromagnética, etc.
Todos lo
hemos sufrido alguna vez. Al ir a abrir la puerta de un coche, !zas!, sufrimos
una pequeña descarga eléctrica, también sucede a veces al saludar a otra
persona, al tocar el pomo de la puerta, etc. La descarga se debe a que nuestros
cuerpos son conductores de la electricidad y al tocar objetos cargados, las
cargas eléctricas se transmiten a través de la piel y, si la diferencia de
carga es muy grande, antes de tocar el objeto, salta un chispa y nos da un
“calambrazo”. Bien pues en ése fenómeno se basa el principio de funcionamiento
de las pantallas táctiles de los famosos iPad, iPhone, i…etc y muchos de los
dispositivos móviles más comunes. Una pantalla de este tipo,
llamada capacitiva, tiene una capa que almacena carga
eléctrica. Cuando la tocamos con el dedo, parte de la carga fluye hacia
nosotros. El dispositivo detecta la variación de carga con unos circuitos
situados en las esquinas y calcula dónde ha tenido lugar el contacto. Una vez
determinado, se asocia esas coordenadas al programa cuyo icono estamos pulsando.
Esta tecnología tiene la ventaja de que las capas son muy transparentes, se
pueden diseñar de manera que detecte varios puntos de contacto al mismo tiempo.
Tiene un inconveniente que muchos de nosotros habremos notado: no hay forma de
que funcione con guantes. Es lógico, sin nos ponemos unos guantes aislantes no
hay transmisión de carga y la pantalla no detecta el contacto. No obstante,
como siempre hay inventos para todo, existen ya en el mercado guantes
especiales con material conductor en la punta de los dedos ideales para los
días muy fríos.
Otro tipo genérico de dispositivos táctiles tienen un funcionamiento
parecido al pulsador de un timbre. Cuando llamamos a la puerta, presionamos
sobre un botón o sobre una superficie y el timbre suena. Aunque hay varios
modelos, el más habitual consiste en poner dos láminas conductoras que, al
presionar el botón, se ponen en contacto y dejan pasar una corriente eléctrica
que acciona el timbre. Al soltar, los conductores se separan, la corriente se
corta y el timbre deja de sonar. Algo parecido sucede con las pantallas basadas
en lo que se llaman sistemas resistivos. Están hechas con dos capas transparentes una conductora y otra resistiva.
Las capas están separadas por una pequeñísima distancia de tal manera que, al
presionar, entran en contacto y el dispositivo calcula donde se ha producido
éste. Aunque en otros tiempos fueron muy populares, este tipo de pantallas está
perdiendo mercado a marchas forzadas.
Pantallas Resistivas
Una pantalla táctil resistiva esta formada por varias
capas. Las más importantes son dos finas capas de material conductor entre las
cuales hay una pequeña separación. Cuando algún objeto toca la superficie de la
capa exterior, las dos capas conductoras entran en contacto en un punto concreto.
De esta forma se produce un cambio en la corriente eléctrica que permite a un
controlador calcular la posición del punto en el que se ha tocado la pantalla
midiendo la resistencia. Algunas pantallas pueden medir, aparte de las
coordenadas del contacto, la presión que se ha ejercido sobre la misma.
Las pantallas táctiles resistivas son por norma
general más asequibles pero tienen una pérdida de aproximadamente el 25% del
brillo debido a las múltiples capas necesarias. Otro inconveniente que tienen
es que pueden ser dañadas por objetos afilados. Por el contrario no se ven
afectadas por elementos externos como polvo o agua, razón por la que son el
tipo de pantallas táctiles más usado en la actualidad.
Pantallas Capacitivas
Una pantalla táctil capacitiva esta cubierta con
un material, habitualmente óxido de indio y estaño que conduce una corriente
eléctrica continua a través del sensor. El sensor por tanto muestra un campo de
electrones controlado con precisión tanto en el eje vertical como en el
horizontal, es decir, adquiere capacitancia. El cuerpo
humano también se puede considerar un dispositivo eléctrico en cuyo interior
hay electrones, por lo que también dispone de capacitancia. Cuando el campo de
capacitancia normal del sensor (su estado de referencia) es alterado por otro
campo de capacitancia, como puede ser el dedo de una persona, los circuitos
electrónicos situados en cada esquina de la pantalla miden la ‘distorsión’
resultante en la onda senoidal característica del campo de referencia y envía
la información acerca de este evento al controlador para su procesamiento
matemático. Los sensores capacitivos deben ser tocados con un dispositivo
conductivo en contacto directo con la mano o con un dedo, al contrario que las pantallas resistivas o de onda superficial en las
que se puede utilizar cualquier objeto. Las pantallas táctiles capacitivas no
se ven afectadas por elementos externos y tienen una alta claridad, pero su
complejo procesado de la señal hace que su coste sea elevado.
Como veis y a groso modo en las pantallas resistivas hay
que ejercer una cierta presión, con el dedo o un objeto, para que se ejecute la
orden, en cambio en las capacitivas con
sólo poner el dedo en el campo de electrones que es la pantalla ya se obtiene
la orden.
Inconvenientes de las pantallas capacitivas es
que no funcionan con objetos tipo lápices o cosas por el estilo, tiene que ser
el dedo y tampoco vale con guantes, así que en invierno a quitárselos para
llamar por teléfono. Por contra las pantallas resistivas si
funcionan a través de los objetos pero para utilizarla como dispositivos
táctiles pierden fluidez y rapidez en la ejecución.
La diferencia entre las pantallas táctiles capacitivas y resistivas se
origina en su propia construcción. Mientras que las primeras funcionan gracias
a un controlador que genera un campo eléctrico uniforme y registra las
pulsaciones de nuestros dedos, las segundas se basan en el contacto entre una
capa superior y una inferior, que una barra conductora interpreta con la ayuda
de tinta de plata.